miércoles, 12 de diciembre de 2007

Hacia la Navidad

El Aviento que Dios quiere no es solo un tiempo, es una actitud profunda. No es tiempo cronológico, sino tiempo espiritual. Y siempre, puede ser Adviento, superando los límites del calendario.
El Adviento es:
  • El que cultiva y desarrolla la esperanza.
  • El que enciende todas las lámparas de la espera.
  • El que agre los oidos a la escucha.
  • El que dispone cuidadosamente el alma para la acogida.

¿Como puedes tú hacer realidad en tu vida el Adviento?

Reflexiones de la mañana

1 comentario:

Anónimo dijo...

que bonita es l navidad